I
Labios arrugados blancos de tanto
esperar
algo de ti es como tocar la puerta del
Inferno
rojo, desangrante, cabezas mutiladas en el
sinfín
de pensamientos crudos y
fríos
como la piel esparcida alrededor de tu ombligo.
II
La música penetra mis orificios dilatados.
El humo psicodélico.
La forma de las hojas,
invitándome a seguir su baile.
El sol aclara tus cabellos,
tus párpados entrecerrados que tiemblan cuando me acerco.
Labios arrugados blancos de tanto
esperar
algo de ti es como tocar la puerta del
Inferno
rojo, desangrante, cabezas mutiladas en el
sinfín
de pensamientos crudos y
fríos
como la piel esparcida alrededor de tu ombligo.
II
La música penetra mis orificios dilatados.
El humo psicodélico.
La forma de las hojas,
invitándome a seguir su baile.
El sol aclara tus cabellos,
tus párpados entrecerrados que tiemblan cuando me acerco.